- Un grupo de mujeres, participantes en una nueva edición de nuestra “Ruta entre Vecinas”, revisa el papel de otras mujeres en la Historia
- Especial recuerdo y atención a las figuras de las activistas Josefina Samper y Fátima Mernissi
En el marco del proyecto «Warmi» de Apoyo Psicosocial para Mujeres Migrantes, financiado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el Fondo de Asilo, Migraciones e Integración, hemos organizado la primera «Ruta entre Vecinas» de este 2018 que, en esta ocasión, se ha centrado en analizar el papel de las mujeres en la Historia. Y lo hemos hecho desde un rinconcito de la biblioteca municipal «Luis Rosales» en Carabanchel Alto.
Allí, y tomando como referencia el papel activo y luchador de la recientemente fallecida Josefina Samper así como el de la intelectual marroquí Fátima Mernissi, la Ruta ha servido para analizar el papel jugado por tantas y tantas mujeres en el desarrollo de muchos de los principales acontecimientos de la Historia.
“Las mujeres hemos estado ahí siempre y hemos contribuido aunque no se nos haya dejado mostrarlo”- Esa ha sido una de las reflexiones que han surgido en esta Ruta entre Vecinas, el pasado 20 de marzo. Mujeres de aquí y de allá juntas para hablar y conocer la historia de otras mujeres que cambiaron la historia desde sus conocimientos, su actitud proactiva y su humildad en la tarea.
Josefina Samper, activista política y sindical fallecida el pasado 13 de febrero y Fátima Mernissi, intelectual marroquí precursora del feminismo musulmán que también nos dejó en 2015, fueron las protagonistas que nos permitieron hablar acerca de los oficios que las mujeres hemos desempeñado y las vidas femeninas que llenan y han llenado este planeta con su aportación a todos los niveles.
El punto escogido en esta ocasión fue la Biblioteca pública «Luis Rosales», en Carabanchel Alto. Un lugar en el que encontrar información sobre estas historias de vida y en el que disfrutar de un tiempo para una misma si se busca el silencio, o para estar en compañía si se disfruta de sus actividades en familia o con otras personas adultas. Maite, su directora, a la que agradecemos en el alma su inmejorable trato, nos guió a través de un completo recorrido por las diferentes salas de la biblioteca explicando los innumerables recursos puestos a disposición de un público diverso como es el de la ciudad de Madrid. Así, pudimos conocer su catálogo de libros con letra grande, en braille o audiolibros para personas con dificultades de visión o invidentes, la extensa oferta de prensa y revistas para lectura en sala o para préstamo, y la gran cantidad de libros dedicados a todas las materias recogidas en la biblioteca.
Tras la visita guidada comenzó el viaje por la historia, las preguntas con respuesta y las que no la tenían, la admiración ante la vida de mujeres desconocidas para quienes participaban en la actividad, pero que habían cambiado la historia con su contribución más o menos sonora. Pudimos hablar de mujeres, de hombres, de oficios, de injusticias pasadas y presentes pero también de justicia social, de valorar las aportaciones invisibles y visibilizarlas a las generaciones futuras mediante el estudio (en la biblioteca o en casa) y la conversación en el día a día.
Una mañana llena de despertares y de espacios de reflexión que nos llevaron lejos en la imaginación.