El paseo es una buena forma de dar rienda suelta a la conversación. Y eso fue lo que sucedió en nuestra ruta por el centro de Valladolid para conocer un poco mejor esta ciudad.
Fue un encuentro de 17 personas de diferentes nacionalidades y que viven circunstancias personales muy diversas y no siempre fáciles, pero que compartieron un momento de esparcimiento conociendo las calles del centro de Valladolid que están dedicadas a mujeres que, por diferentes motivos, han sido relevantes en la ciudad. Pudimos analizar la presencia de la mujer en las ciudades, el papel que se nos concede, los valores que se nos reconocen y reflexionar sobre si son compartidos o no por nosotras mismas… además de concluir, finalmente, que no se trata de ser mejor que los compañeros varones, sino de poder disfrutar de los mismos derechos y oportunidades.
Fue hermoso porque se generó un espacio de encuentro entre diferentes culturas y, desde su generosidad, compartieron conversaciones a lo largo de las calles de Valladolid. ¿No son escasas las oportunidades que se generan para estos encuentros?
Agradecemos enormemente la atención que nos dieron en el Centro Cívico El Campillo y la Biblioteca Pública de Castilla y León, donde nos explicaron los recursos, servicios y formas de acceso y participación en las actividades que ofrecen estos espacios de interés y participación ciudadana. Gracias Manuel y gracias Nieves.
